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Se trata de una trepadora que se asemeja a una parra leñosa y que proviene de China. En ese país es conocida como "la planta de los cinco sabores", ya que sus frutos –unas pequeñas bayas de color rojo intenso– cuentan con toda la variedad de sabores posibles: picante, dulce, amargo, salado y ácido.
Beneficios
- ¡Siente la energía!: Se cree que tomar unas cuantas bayas de esta planta cada día ayuda a aumentar la vitalidad física y mental y ayudan a combatir el estrés. La razón es que contiene un compuesto natural adaptogénico (que tiene un efecto normalizante o equilibrante sobre distintos sistemas corporales), que solo poseen unas cuantas plantas en el mundo y, una de ellas, es la schizandra. Gracias a esta sustancia, esta planta permite a quien la consume tener la sensación de estar lleno de energía y gozar de un óptimo rendimiento mental. De hecho, se presenta como una clara alternativa a la cafeína.
- Protege tu hígado: Las bayas de schizandra pueden ayudar a metabolizar mejor las toxinas. También puede ser eficaz contra los desórdenes hepáticos crónicos en general, como la hepatitis viral crónica. Pero en ese caso, solo debes tomarla si el especialista te lo aconseja y como complemento al tratamiento médico prescrito.
- Mejora tu circulación sanguínea: La medicina tradicional china utiliza esta especie para mejorar el riego sanguíneo, aunque, gracias a sus propiedades ligeramente sedantes y antidepresivas, también se aplica para aliviar los estados depresivos asociados a un estrés prolongado y al agotamiento mental.
- Antioxidante y potenciador del deseo: Otro de sus componentes es el betacaroteno, un antioxidante natural que protege la piel frente al temido envejecimiento. Además, esta planta se ha utilizado en la medicina oriental como potenciador del deseo sexual.
- Exceso de sudoración: Sus propiedades naturales ayudan a regular la producción de sudor.
- Trastornos digestivos: Una de las bacterias más frecuentes y responsables de los problemas gastrointestinales, la Helicobater Pylori, parece no encontrarse cómoda con esta planta, por lo que es muy eficaz para los problemas gastrointestinales.
Otros Usos
Las bayas de schizandra también se emplean para tratar ciertas afecciones respiratorias, como el asma o la tos crónica, o para mejorar problemas cutáneos, como la urticaria y el eccema, efectos que pueden estar relacionados con su acción estimulante de las defensas.
Cómo usarla
- En infusión: Poner un cazo de agua en el fuego y, cuando empiece a hervir, añadir 15 o 20 bolitas un minuto con el agua hirviendo. Apagar el fuego, dejar reposar 10 minutos y poner en un vaso y tomar. No hay que volver a reutilizar las bayas usadas dos veces seguidas.
- En aceite: Aplicar una pequeña cantidad de aceite sobre la piel limpia y seca.
En infusión se suele combinar con ginkgo para aumentar la memoria y mejorar la concentración.