Con la llegada del otoño, es necesario prevenir y comenzar a vacunarnos contra las enfermedades que más atacan cuando llega el frío intenso.


Las vacunas comenzaron a producirse desde finales del siglo XVIII. Su efectividad consiste en introducir en el cuerpo una cantidad muy pequeña y debilitada de los patógenos, los causantes de las enfermedades (gripe, viruela, neumococo…) para que el organismo se habitúe y sepa luchar contra ellos más adelante, en invierno. Por eso, las vacunas no son fiables al 100%, porque el organismo puede tener “lagunas” y no recordar algunos virus, y porque los que nos ataquen pueden mutar, cambiar un poco, y al organismo le cuesta más reconocerlos.

En otoño, las vacunas más habituales son las de la gripe y el neumococo (causante de la neumonía). Este año, además, añadiremos la de la nueva gripe A. Para conocer los calendarios de vacunación, debes consultar a tu médico o Centro de Atención Primaria. Aquí tienes algunos detalles útiles respecto a las vacunas otoñales. 

  • GRIPE COMÚN: La vacuna de la gripe es efectiva en ocho de cada diez pacientes. La enfermedad afecta a las vías respiratorias y causa fiebre y molestias generales. Los grupos de riesgo tienen más posibilidades de pasar la gripe o de sufrir alguna complicación, que por ello deben ser vacunados son, en este caso, son las personas de entre 60 y 65 años, enfermos crónicos, quienes viven en residencias de ancianos o de estudiantes, el personal sanitario y los profesores.

  • GRIPE A: Producida por el virus H1N1, es muy similar a la “gripe común”. Sus síntomas son más intensos y repentinos, pero su forma de contagio es la misma. Al ser un nuevo virus, no estamos inmunizados de forma natural. En España, la nueva vacuna se va a administrar este otoño a los niños a partir de los seis meses que sufran enfermedades crónica, a enfermos adultos crónicos, embarazadas, al personal sanitario y al de servicios esenciales (Fuerzas de Seguridad del Estado, Bomberos y Protección Civil).

Consulta el Calendario vacunal para saber qué vacunas te conviene ponerte y si forma parte de la población con riesgo de padecer determinadas enfermedades.

Y frente a la meningitis...

  • NEUMOCOCO: Este virus es uno de los causantes principales de la meningitis, una enfermedad que a menudo requiere hospitalización, si bien es mucho menos frecuente que la gripe. Se da principalmente durante el invierno en bebés y mayores de 65 años. La vacunación no es tan común, porque suele afectar sobre todo a personas con riesgos especiales, como aquellas con enfermedades crónicas. Para saber si debes vacunarte, no dudes en consultar a tu médico.

 

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