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Cambiar de casa, de pueblo y hasta de médicos puede suponer un trastorno en la vida de muchos mayores. La familia debe estar muy pendiente.
Conservar ese bonito tono dorado que el verano ha dejado en tu cuerpo es posible. ¿Cómo? Con algunos cambios en tu menú y una hidratación adecuada.
Mientras la ilusión y los nervios se mezclan en el ánimo de los niños, los padres podemos ayudarles en el arranque escolar adaptando su horario de sueño y pidiendo cita para una revisión de vista y oído. ¿El objetivo? Que puedan rendir al máximo.
La grasa de algunas zonas rebeldes nos obsesiona. Deshacernos de la que se acumula en los muslos, alrededor de la cintura o en las dichosas cartucheras pasa, necesariamente, por reducir la del resto del cuerpo.
A cualquier edad podemos conseguir pequeñas mejoras en nuestras capacidades cerebrales. Y siempre es buen momento para comenzar. ¿Sabes cómo?
Una vez superada la ansiedad del primer momento, cuando los niños tienen fiebre debida a una infección viral, debemos estar atentos a su evolución y consultar al pediatra ante cualquier duda.
Está claro: divertirse y descansar son las prioridades en vacaciones. Sin embargo, conviene marcar unas pautas de ejercicios y hábitos, que no deberes, para que la vuelta al colegio sea lo más fácil posible.
Ya sudabas más de la cuenta con esos incómodos sofocos de la menopausia … y ahora este calor. ¿Sabías que tú puedes hacer mucho por deshacerte de estas molestias?
Reduce la incidencia de enfermedades cognitivas y evita dolencias cardiovasculares y respiratorias. El ejercicio físico tiene muchos beneficios, y la edad no debe ser una excusa, así que cálzate las zapatillas: le ganarás tiempo al calendario.
El sol, el cloro de la piscina y la sal y la arena de la playa son los grandes enemigos del cabello durante el verano. Con esta guía básica de cuidados sabrás cómo protegerlo.
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